De viaje...

Lirdi escribió:Lirdi se paseaba de una punta a la otra de su habitación… Había tomado un baño y solo estaba con un camisón blanco… Sostenía su barriga, la miraba, se detenía, seguía caminando… ¿Qué haría?...
Era evidente que desde que había regresado de la cruzada no usaba aquellos vestidos ajustados con corsé que tanto le gustaban…Por el contrario usaba unos bastante amplios con un corte justo debajo del pecho, que no dejaban notar su abdomen con detalle… Había dejado a cargo al Capitán Faifolk de la distribución de guardias y revisión de las milicias de la ciudad puesto que ella cada vez era menos el tiempo el que se pasaba en temas militares, y nada en entrenamientos…

-¡Ay mi amor! ¿Cuándo regresaras? Ya no puedo seguir postergando el anuncio de esta noticia… Ya es notorio, mi vida… ¿Por qué tardas tanto?- Decía en voz alta en la solitaria habitación… hacia días que no sabia nada de su esposo y eso la preocupaba…

La Jones seguía caminado con las manos en su vientre, la decisión tenia que tomarla ella, pues de él nada sabía… y hasta pensaba que debería hacer el anuncio sola, pues no habría forma de ocultarlo mucho más…

Lirdi seguía caminando, cuando la puerta a sus espaldas se abrió de repente…

-¡Mi Señora!- Dijo Ofelia agitada por subir rápidamente las escaleras… -Tiene visitas…-

-¡Ay Ofelia! ¿Queréis matarme vos? ¿Qué son esas formas de entrar tan alborotadamente por que hay visitas? ¡Un día de estos cuando me hables así, me encontraréis muerta, muchacha!- Respondió Lirdi al tiempo que se volteaba a ver a su doncella…

-Mil disculpas mi señora.- Dijo la joven avergonzada. –Pero no digáis eso, ¿Qué haría yo sin vos?-

-Podrías hacer tantas cosas sin mi… ¡Tantas que no te imaginas!-

-¿Estáis preocupada por lo abultado que se ve vuestro vientre?- Dijo Ofelia que era la única en la casa que conocía la noticia…Lirdi afirmo… -¿Y aun no se lo habéis dicho al padre?-

-No respondió mi última carta… ¿Qué quieres que le diga? Ni siquiera se como esta, ni donde, no puedo darle una noticia así sin saber que esta bien…-

-Pero, mi dama, cuando regrese su familia del viaje que han hecho a la capital, lo notaran… Lo habéis estado disimulando bien, pero incluso bajo los abultados vestidos comienza a notarse…-

Ofelia solo decía cosas que Lirdi ya sabia, justamente las cosa que pasaban por su mente mientras caminaba de un lado a otro… Tendría que decírselo a sus primos, con su esposo o sin él…

-Muchacha, ¿Has dejado a mis visitas esperando y ni siquiera me dices quienes son?- Dijo buscando dejar el tema…

-Disculpad mi señora… La dama Lulu Bathory y el caballero Philipp Thompson están aquí…-

-Muy bien Ofelia, hacedlos pasar a la sala y decidles que enseguida bajare… necesito uno de esos grandes vestidos…-

La doncella asintió y salio de la habitación, Lirdi se dispuso a cambiarse tan pronto como podía para bajar a recibir a los invitados…

Rápidamente ubicaron a la dama y al caballero en la sala y sirvieron bien mientras esperaban a la señora de la casa…

Philipp escribió: Philipp se siente feliz al estar en tan grata visita junto a su amada Lulu, que le da las gracias a su amor, por tener el gusto de poder visitar y conocer a una de sus mejores amiga, así que levanta la copa de vino, y le mirá de forma complaciente y brindan, mientras se quedan a la espera de la señora Lirdí.

Lirdi escribió:Cuando estuvo lista, con un pomposo y amplio vestido azul, Lirdi bajo a la sala donde esperaban los invitados. Al ver a Lulu enseguida se dirigió a saludarla…

-Mi querida Lulu, tanto tiempo sin veros! Que alegría!- Decía al tiempo que abrazaba a su amiga… -Es un placer tenerte en casa…-

La Jones dirigió su mirada al caballero,
-Y vos debéis ser Philipp, encantada de conoceros. Si sois amigo de la dama Lulu en esta casa sois más que bienvenido.-

Tras saludarlos, la dama se dirigió a sentarse,
-Sentaos y poneos cómodos por favor.
Es una pena que esté sola en casa y no podáis saludar a mi prima Elhanyan, se encuentra de viaje en la capital…-

Lirdi escribió:Lirdi sonrío al escuchar aquello de “mucho mas que amigo” se alegraba por la dama, mucho realmente. Luego vio que la Bathory sacaba pergaminos y más papeles de aquel paquete…

-¿Obras de teatro? ¡Que maravilla! ¡Sabéis que amo el teatro, podéis contar conmigo, Lulu! En lo que vos dispongáis, actuando, seleccionando trajes, escenarios, retocando el guión. Lo que deseéis, o todo ello también. ¡Imaginad que diría mi padre! La que regenta un señorío, en el escenario sirviendo de entretenimiento al resto… - Lirdi hizo una pausa… -Mi padre… ¡de seguro estaría orgulloso! Siempre dijo que debía hacer aquello que me apasionaba mas allá de cualquier rango que ostente.- Finalizo la Jones con una sonrisa.

Ante el susurro de Lulu sobre el traje la Jones intentado mantenerse seria, respondió…
-¿El sastre? ¿Fallar? No mi dama, ha hecho exactamente lo que le he pedido…- En un intento de dejar a Lulu con la intriga…

Brynhildr escribió:Una tosecilla hizo que las rubias levantaran su cabeza de la maraña de greñas y mimos. En la puerta, una de las doncellas aguardaba pacientemente con las manos cruzadas sobre su regazo

- Hay visitas, seño..ritas, la dama Lulu Bathory y el caballero Philipp Thomson les esperan en el salón central.

¡¡Visitas!! La rubisela se puso en pie de un salto y se acomodó el vestido. Bajaba corriendo las escaleras mientras trataba de volver a meter sus greñas dentro del improvisado moño sin mucho éxito. En fin, en peores situaciones la había visto Lú.

Entró como un remolino en el salón y sin más protocolo dió un gran abrazo a la Bathory antes de hacer una pequeña reverencia ante Phil

- Me alegra veros por aquí - les dijo con una gran sonrisa - ¿os quedaréis mucho tiempo? Decid que sí y haréis feliz a esta pobre rubia

Mientras les invitaba a sentarse, indicó a la doncella que les sirviera algo para tomar.

Philipp escribió:Philipp hace una pequeña reverencia a la Rubia, y le agradece la estancia y el recibimiento en su humilde morada, asombrado ante el recibimiento, de lulu y la rubia, piensa:

"Parece que no se hubieran visto en la vida, en fín supongo que eso es una amistad de años"...

Observa y escucha galantemente la conversación de forma grata, acompañado de una copa de vino y de las damas presentes.

Crimea escribió:- ¡Aquí! - Gritó la otra rubia al terminar de descender las escaleras y salir a todo correr hasta el salón central. Se había demorado intentando parecer medianamente presentable, porque después de brincar con dos rubias locas durante un buen rato... digamos que su cabello y sus ropas habían acabado de cualquier modo, menos, precisamente, decentes.

Le dio un importante achuchón a la Bathory, mientras pensaba que la morena era realmente una mujer valiente. No sólo había aguantado la compañía de las hermanas en Castellón sin sufrir daños visibles, sino que en un alarde de cortesía, había sido capaz de ir a visitarlas al pasar por Segorbe. Era un gesto que la honraba, aunque la mayor de las Rubiá ya hacía tiempo que guardaba un gran afecto por la dama.

- Bienvenidos al Águila, ¡qué bien os veis ambos! - Dijo soltando por fin a la Bathory, que se removía inquieta entre sus brazos. - ¿Qué os trae por aquí?¿Os quedáis? ¿Si? ¿Siiii?

Ducce escribió:El De Bournes se habia aferrado fuertemente a sus libros de navegación, le apasionaba bastante el tema yquería estar bien instruido para cuando tuviera que dirigir su propio barco. Luego de un largo rato decidió hacer una pausa e ir a ver si habian llegado el resto de las rubias residentes del Águila. Al bajar por las escaleras, llegó al hall central donde se encontró no sólo a las rubias sino que también habian visitas en el Castillo. Llegó al lugar y recibió a su amada con un beso...

Amor!, qué bueno que has llegado bien! y mira, hay visitas!

Ducce se dió la vuelta y se dirigió a Lulu y Philipp...

Un placer recibirlos!

Alfred!, trae unas copas del mejor vino!

En unos minutos el sirviente estaba repartiendo copas para cada uno, mientras seguían charlando...

Por cierto, felicitaciones por vuestro nombramiento, Lulu. Tendreis que trabajar conmigo en el Real...

Lady_ginebra escribió:La última de las Rubiá que aún no había hecho acto de presencia en el salón se encontraba tumbada en la cama de Crimea tratando de recuperar el aliento. Una vez que la estancia dejó de dar vueltas, se puso en pie tratando de arreglarse su inseparable moño.

¿A dónde habrán ido estas dos locas? -Geneve se rascaba la cabeza con una horquilla mientras hacía memoria- Hhhhhmmmm creo que nos anunciaron una visita, pero lo recuerdo todo como borroso. Habrá que ir a cotillear.

Al ver la enorme escalera que debía bajar, la pereza se adueñó de ella, débil tras la fusión greñil, de modo que, ni corta ni perezosa, se sentó a horcajadas en la barandilla de la escalera y se deslizó a trompicones hasta el piso bajo. Tras desmontar, con las mejillas encendidas a causa de la travesura, se topó con un Alfred que la observaba muy serio con una bandeja y varias copas de vino.

-Gracias Alfred!! Siempre adelantádote a mis deseos.- Dijo la rubia mientras le arrebataba una copa de la bandeja. -Un día de éstos trataré de persuadir a Ducce para que te deje servir en mi casa.- Ginebra vio, no sin cierto regocijo, como la barbilla del sirviente comenzaba a temblar y tras darle una palmada en el hombro, irrumpió en el salón al modo Rubiá. Es decir, copa en mano.

-Pero si es la mismísima Dama Bathory!- Exclamó acercándose al grupo. -Encantada de verla de nuevo y muy bien acompañada por lo que veo.- Hizo una reverencia al caballero que estaba a su lado. -Espero que el viaje no les tenga demasiado fatigados como para impedirles pasar el día con nosotros.

Dicho esto, apareció Alfred en el salón, repartiendo copas para todos.

Philipp escribió: En cuanto su amor le presento a los presentes que allí se reunian, hizo una pequeña reverencia mostrandose placido de conocer nuevas amistades, miró a su amor y le correspondio el guiño, quien, a continuación le presentaría al Señor Vizconde de Olocau, le estrecho la mano, diciendole: "Es un placer conocerle, y poder formar parte de esta grata reunión", al recibir una copa de vino, y conversar con el caballero allí presente.

Brynhildr escribió:- Mi Bathory - le decía con una sonrisa - hay que aprovechar, o nos vemos constantemente o pasan meses sin poder disfrutar de vuestra presencia.

La dama le tendió un paquetito color cyan - Oh, la hopalanda - dijo mientras la tomaba - nada que agradecer, desde entonces siempre llevo una muda extra en el petate por si acaso.

La rubia aprovechó la llegada de Cri para observar por un momento a su amiga y a Phil... no podía negarse que formaban una pareja muy atractiva. Sonrió al ver cómo la miraba el caballero, más o menos con la misma cara que Cri miraba a las empanadas recién salidas del horno. Se alegraba de que la vida hubiera puesto a aquel hombre en la vida de Lú justo en el momento más adecuado.

La entrada de Ducce en el salón la sacó de sus pensamientos. Mientras se acercaba a darle un beso, susurró en su oído - una botella de vino, tú y yo... es una cita oficial - Una cosa es que el secuestro se hubiera pospuesto y otra que se fuese a librar así como así.

Genevita apareció a continuación y se unió al grupo. La Rosenrot no pensaba en nada, sólo miraba a su alrededor con una sonrisa pegada a los labios sintiéndose la mujer más afortunada del mundo.